Este mes de septiembre, cuando la calma comienza a regresar a la bahía de Portmany, el Club Nàutic Sant Antoni ha retomado la actividad Open Adults Windsurf. Entre las participantes, hay dos mujeres extraordinarias, que han vuelto a demostrar que el deporte no tiene edad y muy especialmente el windsurf, que además ofrece la posibilidad de disfrutar de una conexión directa con el mar. Se trata de Montse Cirera y María Rodríguez, ambas jubiladas, de 73 y 67 años, respectivamente.
Antes de iniciar las clases con la monitora del CNSA y vigente campeona de España y de Balears, Oren del Álamo, pidieron afrontar una prueba para determinar su nivel de cara a participar en la actividad, demostrando de lo que son capaces. Montse hacía 40 años que no se subía a una tabla, pero exhibió que no ha olvidado la técnica, siendo capaz de navegar sin apenas caerse. María, por el contrario, tuvo que esforzarse más para mantenerse en pie, algo que finalmente consiguió y que ella misma definió como todo un éxito.
Ambas son personas muy activas y dispuestas a todo, y en breve tienen planeado hacer un recorrido en bicicleta entre Valencia y Teruel, atravesando una vía verde. También suelen ir a esquiar, practican el running y, en relación con el deporte, siempre están dispuestas a todo. “Al menos, mientras el cuerpo aguante”, afirman.
El mes pasado, Montse ya asistió a la actividad de vela ‘Eivissa en Gran’, que se celebró en Es Nàutic, y María fue una de las piragüistas que participaron en la XXII edición del Día de la Piragua, el pasado 9 de septiembre. Al pasar por Es Nàutic en el transcurso de esas dos jornadas, se enteraron de la actividad de windsurf para adultos y propusieron a los monitores del Club hacer una prueba previa. Su propuesta fue aceptada y, tras demostrar de la pasta que están hechas como deportistas competitivas, las dos destacaron la implicación de los técnicos del CNSA para motivarlas y animarlas a navegar sobre una tabla de windsurf.
La actitud y vitalidad de Montse y María constituyen un magnífico ejemplo de cómo, si el físico acompaña, las personas mayores también tienen la oportunidad de navegar y disfrutar de unas actividades náuticas, que están abiertas a todos los públicos, tanto menores como mayores. La vela, el piragüismo y el windsurf, en definitiva, no tienen límite de edad en el Club Nàutic Sant Antoni.